Como en todas las historias generacionales, la de RABAT es un relato en el que en el que convergen el esfuerzo, la ilusión y la unión. La firma de joyería nació en 1977 en una pequeña boutique familiar y “desde entonces hemos crecido hasta convertirnos en una joyería que celebra el paso de las generaciones”, explican desde el equipo de RABAT. Así que crear una línea de piezas con el superpoder de guardar recuerdos y hacerlos viajar en el tiempo era casi una obligación.
Así nació RABAT Three Wishes, una colección que representa el pasado, el presente y el futuro, y que tiene el deseo de formar parte de nuestras historias más personales. Porque las joyas “cuentan historias alegres, emotivas, emocionantes, aventureras…. Inician etapas, dan la bienvenida a nuevas generaciones, celebran el amor y la unión entre hermanos, amigos, padres e hijos, nietas y abuelas… Algunas llevan grabadas fechas memorables o son protagonistas de hitos vitales: acompañan en graduaciones, comuniones y bodas, y hacen especial tanto a quien las regala como a quien las recibe. Todas las joyas atesoran recuerdos propios e intransferibles. Como dice nuestro fundador: son lo más cercano a viajar en el tiempo con la gente que quieres”.
Y para emprender este viaje tan especial nos dejamos llevar por una colección de piezas que son únicas, “primero por su valor sentimental —cada pieza de RABAT Three Wishes albergará una historia distinta y personal, y esto es el fin último de esta colección—; segundo, porque es un testimonio de artesanía y pasión por el oficio; y, tercero, porque es un tributo a la elegancia eterna y atemporal que hace que cada pieza pueda ser compartida generación tras generación”.
1. Su valor sentimental
“Tras varios años buscando la manera de convertir en joya toda esta trayectoria de artesanía y legado, dimos con un diseño atemporal, elegante y que puede lucirse en cualquier ocasión”. El resultado fue un diseño de líneas depuradas con tres diamantes naturales que representan tres deseos: “Los tres deseos no se centran en una sola cosa, sino que se le puede otorgar diferentes acepciones según el momento vital en el que uno esté. Desde RABAT, estos deseos siempre fueron un claro tributo a las generaciones familiares , pero también un homenaje al pasado presente y futuro que, si se piensa bien, ambos conceptos son lo mismo”.
Cuando a estas piezas las convertimos en testigos de las historias familiares más emotivas su valor se vuelve incalculable. Y aunque el equipo de RABAT dice que estos relatos siempre permanecerán en secreto entre las paredes de sus boutiques, sí que recuerdan con especial cariño cuando “una madre compró la pulsera porque su hija estaba esperando un niño, y resultó que finalmente ¡eran trillizos! Fue una de esas casualidades que seguro recordaremos siempre”. Y es que “el 98% de las personas que compran una joya de RABAT Three Wishes lo hace para un regalo familiar. ¡Y eso nos emociona!”
2. Su impecable artesanía
RABAT Three Wishes se compone de tres piezas esenciales: anillo, pulsera y pendientes, todos adornados con tres diamantes talla brillante y elaborados en oro rosa de 18 quilates. Incluso la elección del oro representa su vocación de legado generacional. “La colección vio la luz con su primera versión en este metal por su calidez, frescura, atemporalidad y versatilidad. Es un tipo de oro que se puede llevar en cualquier momento del día o época del año, por jóvenes y adultos, hombres y mujeres. Esta colección familiar va precisamente de esto, de poder atesorar una joya que represente este valor en cualquier momento”.
Y como las historias más especiales se merecen el trabajo más pulcro, cada pieza de la colección es el resultado de un meticuloso proceso artesanal, donde la selección y engaste de los diamantes —provenientes de fuentes responsables— se realiza con la máxima precisión. Además, la firma ofrece servicios de mantenimiento para asegurar que cada joya conserve su esplendor original, reafirmando su compromiso con la calidad: una condición básica cuando hablamos de una pieza que pasará de generación en generación.
“Si escogemos como referente la pieza icónica por excelencia —y decimos icónica porque es la imagen de la colección—, que es la pulsera RABAT Three Wishes de diamantes naturales y pavé, hablaríamos de unos 90 días de elaboración”. Esto se debe a que primero “cada diamante es seleccionado uno a uno por nuestros maestros joyeros para asegurar su calidad” y, después, se engasta de forma artesanal mediante un trabajo meticuloso: “Los tres diamantes naturales van incrustados en tres octógonos, figura geométrica símbolo del equilibrio entre la fuerza y la elegancia” en cada una de las piezas de la colección.
3. Su legado atemporal
En un mundo donde las tendencias van y vienen, y nada parece ser eterno, RABAT Three Wishes tiene el fantástico (y tan necesario) poder de trascender modas para convertirse en un legado emocional. Fue lanzada en 2021 para encapsular recuerdos y emociones como un testigo de las historias que dan sentido a nuestra existencia, invitándonos a celebrar y preservar los momentos más significativos de la vida.
Pero que una colección sea atemporal no significa que su diseño no sea contemporáneo. Desde su lanzamiento, RABAT Three Wishes ha evolucionado para incluir nuevas versiones con pavé de diamantes blancos, que realzan el brillo de las piezas originales. Y, posteriormente, se incorporaron opciones con pavé de gemas de colores: diamantes negros que aportan un carácter unisex, rubíes que intensifican el simbolismo del amor, zafiros azules que evocan serenidad y esmeraldas que transmiten esperanza.
Dos años después del lanzamiento de la colección “nació la versión en oro amarillo, y en 2024, la de oro blanco. También se han incorporado a varias de las piezas pavés de diamantes naturales o diamantes negros; la colección ha ido creciendo gracias a su buena acogida, satisfaciendo así estilos más personales”.
Esta variedad de combinaciones es precisamente la que nos permite hacer que la historia sea más nuestra, eligiendo, casi de forma personalizada, la pieza que mejor refleje nuestro legado.
Y tú, ¿qué historia quieres inmortalizar con RABAT Three Wishes?
