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TAG Heuer Carrera, el mito eterno

El famoso cronógrafo de TAG Heuer cumple sesenta años y la firma lo celebra con una ambiciosa puesta al día de la colección que abarca diferentes tamaños, funciones y acabados. Todas las nuevas referencias comparten su vínculo con el diseño original de 1963, aunque con la mirada puesta en los gustos actuales.

Todas las grandes creaciones tienen un autor, y el del icónico Carrera es Jack Heuer. El carismático presidente honorífico de TAG Heuer creó este reloj en 1963 con el deseo de dotar a la marca de un producto capaz de atraer a las nuevas generaciones de aficionados. Y sabía perfectamente qué era lo que buscaba: en el momento de crear el Carrera, Jack Heuer apenas acababa de alcanzar la treintena. El resultado fue un reloj de deslumbrante sencillez, estilizado diseño, con una esfera carente de adornos. Heuer era un amante confeso de la escuela de diseño racionalista y aplicó estos mismos preceptos al primer reloj diseñado por él.

Nueva campaña TAG Heuer Carrera Chronograph dirgida por David Leitch y protagonizada por Ryan Gosling

Sesenta años más tarde, el Carrera no ha perdido un ápice de su atractivo. TAG Heuer ha iniciado el aniversario con una imponente remesa de novedades que engloba la poliédrica personalidad de este reloj, capaz de representar la imagen más retro de la firma suiza y, a la vez, personificar las últimas tendencias del mercado. Y la fiebre Carrera no acaba aquí: TAG Heuer ya nos anuncia que habrá más novedades de Carrera en camino. El mito eterno de TAG Heuer.

La reinvención del pasado

La gran estrella de esta colección conmemorativa del Carrera es la nueva versión del Chronograph de 39 milímetros. Es un reloj importante por varias razones. La más evidente es la original adaptación a los nuevos tiempos de la imagen de los primeros Carrera. Este Carrera Chronograph ‘parece’ vintage y, sin embargo, es radicalmente moderno. Es la misma combinación de pasado y presente que diferencia al 911, el mítico deportivo de Porsche, con quien TAG Heuer colabora desde hace tiempo.

TAG Heuer Carrera Chronograph

El elemento clave del nuevo Carrera Chronograph es su cristal de zafiro. Tiene forma de cúpula y es similar a los usados en los modelos Carrera en los años setenta, por entonces conocidos como glassbox (cajas de cristal), un término recuperado por los aficionados en la actualidad. El cristal glassbox define la imagen del cronógrafo y es el gran responsable de su espíritu vintage. Sin embargo, hay una cosa que hace a este Carrera Chronograph diferente de aquellos modelos de hace medio siglo y es original esfera curvada. Si nos fijamos, en su superficie encontramos un realce que separa la escala taquimétrica del resto de elementos informativos. Es un efecto visual fascinante que nos lleva a disfrutar del reloj desde cualquier ángulo que lo veamos. El doble tratamiento antirreflectante de su superficie garantiza que lo hagamos sin ningún brillo o reflejo que nos moleste.

El nuevo tamaño estándar

La caja de acero tiene un diámetro de 39 milímetros, un tamaño que se ha estandarizado en los últimos años como la referencia dentro del segmento masculino. La falta de bisel hace que el reloj parezca más grande de lo que realmente es. Además, con tan escuetas medidas, se adapta fácilmente a cualquier tamaño de muñeca. El Carrera Chronograph es hermético hasta 100 metros.

TAG Heuer Carrera Chronograph

El apartado técnico trae una pequeña novedad. Se trata de la nueva versión del ya contrastado calibre manufactura Heuer 02, denominado TH20-00. El cambio más importante es la adaptación de un rotor bidireccional, el cual garantiza una carga más precisa y mejor presencia para el espectador. Cuenta con rueda de pilares para el cronógrafo y su reserva de marcha alcanza las 80 horas.

Las dos caras del nuevo icono

El Carrera Chronograph de 39 milímetros se presenta en dos acabados de esfera. Y, si nos fijamos atentamente, son mucho más diferentes de lo que pueden parecer en un principio.

TAG Heuer Carrera Chronograph

Por un lado, tenemos el modelo de esfera azul, con los dos contadores del cronógrafo perfilados por un pequeño realce y una ventana de fecha camuflada en forma de índice de las 6 horas, junto a un discretísimo segundero. Este reloj muestra la cara más moderna y cosmopolita del Carrera Chronograph de 39 milímetros, con un diseño que seguro atraerá a los aficionados más jóvenes.

Negro deportivo

La versión de esfera negra nos conecta con la faceta más deportiva del Carrera, un reloj que, no olvidemos, nació en la pista de competición. Aquí nos encontramos con tres contadores perfectamente definidos por su acabado en contraste, que tanto nos recuerda a otros modelos de TAG Heuer como el Autavia o los primeros Carrera.

TAG Heuer Carrera Chronograph
TAG Heuer Carrera Chronograph

El vínculo con el pasado también es evidente en el acabado beige de la luminiscencia de los índices y las agujas, así como el perforado de su correa negra de piel de becerro. También es un guiño al pasado la colocación de la ventana de fecha a las 12 horas. Esta ubicación era habitual en los primeros modelos de Carrera que llevaron indicador de fecha y los cuales salieron al mercado a mediados de los años sesenta.

La opción más exclusiva

El equipo de TAG Heuer ha sorprendido a los aficionados con una tercera versión de este Carrera Chronograph de cristal glassbox, esta vez equipado con un movimiento tourbillon. No es la primera vez que TAG Heuer emplea este tipo de mecanismo en la colección. Sí lo es que ahora aparezca en un reloj de estética vintage, cuando lo habitual hasta ahora era su presencia en modelos de carácter más técnico y vanguardista. Pero la elección es todo un acierto y la imagen del órgano regulador en la esfera, acompañado de los dos contadores del cronógrafo, es la mejor reivindicación que podemos encontrar de la colección.

TAG Heuer Carrera Chronograph glassbox Tourbillon

Las características técnicas del movimiento obligan a que el reloj sea un poco más grande que sus hermanos cronógrafos. La caja pasa de 39 a 42 milímetros. Sí que mantiene la hermeticidad (100 metros) y su protección con el mencionado cristal tipo glassbox.

En cuanto al movimiento, el calibre TH20-09 es de carga automática, con reserva de marcha de 65 horas y cuenta con certificado de cronometría COSC.

La cara más deportiva del Carrera

El Carrera es un reloj que abarca múltiples caras. Nos puede ofrecer una más vintage, como el anterior de cristal glassbox, o una mucho más deportiva, que encontramos en las dos versiones recién presentadas del Carrera Chronograph con caja de 42 milímetros.

Aquí es el color el que marca la personalidad de la esfera, con un círculo cromático de tres tonos (amarillo, naranja y rojo) que se repite en el realce de la escala de segundos y los contadores del cronógrafo. Es la imagen más divertida y radical del Carrera Chronograph, perfecta para el público más joven que ahora se acerca al mundo de la relojería mecánica.

TAG Heuer Carrera Chronograph glassbox

En esta ocasión, el movimiento elegido es la versión estándar del calibre automático Heuer 02, con una reserva de marcha de 80 horas y visible a través del fondo de zafiro de su caja de acero.

TAG Heuer Carrera Chronograph glassbox
TAG Heuer Carrera Chronograph glassbox

Como atractivo importante que no conviene pasar de largo, esta versión del Carrera Chronograph es más económica que los nuevos modelos de 39 milímetros.

La belleza de lo sencillo

Las novedades de la colección no acaban en el Carrera Chronograph. TAG Heuer también acaba de presentar las nuevas referencias Carrera Date de 36 milímetros, el mismo tamaño con el que fue presentado al mercado el Carrera en 1963. Recordemos que el Carrera nació como cronógrafo y no fue hasta muchos más años más tarde cuando la casa suiza presentó una versión de tres agujas del reloj. Recuperado en 2021, el Carrera Date se ha destapado como un perfecto modelo para el día a día, con un diseño versátil en el que destaca su brazalete integrado.

TAG Heuer Carrera Date

Su caja de 36 milímetros responde a la tendencia moderna de relojes de menor tamaño y carácter unisex. El Carrera Date rompe la barrera de sexo y atrae por igual a hombres y mujeres. Este espíritu rompedor también queda reflejado en la elección de las esferas. Los colores mandan, sin faltar el cada vez más demandado verde o un espectacular rosa. El acabado rayo de sol eleva su brillo y presencia sobre la muñeca, a la vez que marca cuál será una de las tendencias relojera de cara al verano.

Realizados en acero, estos modelos equipan un movimiento automático Calibre 7, vienen con fondo transparente de caja y son herméticos hasta 100 metros.

Momento para la nostalgia

Cerramos la lista de novedades con el primer Carrera que conocimos este año. TAG Heuer comenzó el aniversario con una edición limitada 60ª aniversario y que es, con diferencia, el modelo más fiel al diseño de 1963.

TAG Heuer Carrera 60º Aniversario

La caja es de acero, con un diámetro de 39 milímetros. Viene también protegida por un cristal de zafiro tipo glassbox. En cuanto a la esfera, encontramos el acabado plateado de los primeros Carrera, acompañado para la ocasión de unos contadores en contraste. Tanto los índices como las agujas están tratados con material luminiscente en tono crudo. Equipa movimiento automático Heuer 02. Producción limitada a 600 piezas para todo el mundo.