Esto marca en parte la mayoría de propuestas, donde vemos referencias a la comodidad del hogar y observamos la presencia de accesorios como el pasamontañas, muy en la línea de la mascarilla que nos ha acompañado en este año. Las siluetas, además, se hacen amplias, buscando un punto ‘comfy’ que viene muy marcado por todo el tiempo que hemos estado en casa. ¿Pensábamos acaso que algo tan importante como una pandemia no iba a tener su reflejo en la moda?
Siluetas XXL
Si algo marca una década, eso es la silueta, y parece que nos enfrentamos irremediablemente a un cambio radical de esta. Desde hace ya tiempo veíamos que los pitillos que pusieron de moda Helmut Lang, Raf Simons o Hedi Slimane a principios de siglo cada vez se iban despegando más de nuestro cuerpo y ahora, por si alguien tenía dudas, llega la confirmación. Las camisas se hacen amplias y se desbordan por la cintura, como hemos visto que sucede en las colecciones de Louis Vuitton o Dries van Noten; y lo mismo le ocurre a los pantalones y los jerséis (como los geométricos que ha presentado Giorgio Armani). El hombre busca comodidad y la moda responde a sus demandas (¿o es quizás al revés?).
Pijama party
Y si buscamos estar confortables, dónde mejor que en la cama. Pero claro, ahí poco podemos lucir nuestro estilo (a no ser que nos decantemos por hacerlo en las redes sociales). Tranquilos, también hay solución para esto. Los abrigos se transforman este otoño en batas de estar por casa. Eso sí, con los más ricos materiales, los diseños más contemporáneos y, en algunos casos, incluso acolchadas. Tom Ford o Louis Vuitton son algunas de las firmas que apuestan por esta manera de concebir la nueva elegancia.
Nueva sastrería
Mencionar la palabra elegancia inmediatamente nos obliga a pensar en un buen traje. Pues los diseñadores también están dispuestos a replantearse la sastrería en 2021. Como vemos en Dolce & Gabbana o Prada, es el momento para interpretar de otra forma las chaquetas o ver hasta dónde pueden dar de sí las cremalleras. El traje se lleva, pero de otra forma.
Rojo y arena
En este caso no es ningún título de alguna canción folclórica sino dos de los colores que más van a destacar este otoño. Estamos acostumbrados a que conforme el frío se impone y las noches se hacen más largas, el negro comience a prevalecer en nuestro armario. Si bien esto también sucederá, no podemos desatender la apuesta de firmas como Fendi o Marine Serre. Con los suaves marrones obtendremos un look relajado y casual, mientras que los rojos serán toda una declaración de intenciones.
Piel con piel
Los fanáticos de la saga ‘Matrix’ ya pueden hacer realidad uno de sus sueños: vestir como Neo, su protagonista, con un larguísimo abrigo de piel negra sin que nadie les cuestione por la calle. Esta va a ser otra de las tendencias y, de hecho, la piel lo va a ocupar casi todo, desde el clásico abrigo a las gabardinas.
¿Una partida al béisbol?
Seas o no fanático del béisbol, que sepas que las icónicas chaquetas que hemos visto una y mil veces en las películas americanas estarán en boga en los próximos meses. ¿Lo mejor? Se pueden combinar tanto con un look totalmente sport como con un estilo más arreglado, todo es cuestión de conseguir el punto medio. Para esto, una camisa blanca y algo de gomina nos ayudarán en nuestro propósito.
Cuellos altos
La corbata poco a poco va cediendo terreno en el armario masculino y eso lo vemos en detalles como este: se llevan los cuellos vueltos o de cisne. De hecho, con el tiempo se ha llegado a aceptar estos con americana y traje, sustituyendo así de manera definitiva a la corbata, como vemos en Hermès o Berluti. ¿Cuál es tu opción?
Gorras y pasamontañas
Algo nos tenía que quedar de las mascarillas y aquí lo vemos. Las firmas de moda fueron de las primeras en entender que el ‘tapabocas’ iba a ser una prenda que se quedaría con nosotros un tiempo, así que muchas de ellas lanzaron, al poco de convertirse en obligatorias, sus líneas con estos accesorios. Es normal por tanto, y visto que estas colecciones (como decíamos al inicio del texto) se pensaron en 2020, que muchas firmas reflexionaran sobre esta idea y le acabaran dando un giro. Y aquí está. El pasamontañas vuelve con fuerza: ahora que nos hemos acostumbrado a taparnos la boca, parece que puede ser más fácil que le cojamos gusto a esta propuesta. Por otra parte, si bien nunca diríamos que se habían marchado de nuestro armario, las grandes marcas apuestan en 2021 por las gorras con sus logos en ellas. ¿Y qué tiene que ver esto con las mascarillas? Todos hemos tenido la experiencia de tener que acabar quitándonos las gafas de sol porque los cristales se empañaban al llevar mascarillas, así que es normal que la solución más práctica para protegernos los ojos pase por regresar a los sombreros y gorras, una solución que tiene siglos de vigencia.
