Todos tenemos claro que blanca y radiante debe de ir la novia, o al menos así lo indica la canción de Antonio Prieto, pero, ¿qué sucede con el novio? Hay que asumir que sin él, tampoco hay boda, por lo que no hay que descuidar el aspecto que tiene que lucir un hombre hoy en día cuando se enfrenta al “reto” del altar (por decir un lugar donde casarse).
Analizadas las propuestas que hemos encontrado, tanto en desfiles especialmente destinados a la moda nupcial como a la alta moda, lo cierto es que podemos concluir una serie de indicaciones de estilo que debemos seguir si no queremos arrepentirnos cuando echemos la vista atrás en nuestras bodas de oro.
El traje sigue siendo, y parece que por mucho tiempo, uno de los mejores aliados, como lo es también el chaqué. El esmoquin busca su sitio, pero todavía parece que nos falta mucho para convertirlo en un imprescindible de un enlace matrimonial. Y, por lo que respecta a las bodas menos convencionales, está claro que un aspecto desenfadado, pero cuidado, es la clave para triunfar.
No queremos tampoco olvidarnos de otra propuesta que cada vez cobra más fuerza: el novio de fiesta. Es decir, un look donde el color o las lentejuelas tengan su sitio. Nosotros, además vamos más allá con una idea que puede parecer descabellada, pero que tiene su razón de ser: si una novia hoy en día se cambia de vestido al menos dos veces durante el día, por qué no vamos a hacerlo nosotros. Dad la bienvenida, en este repaso por el estilo de un novio, al look de fiesta, porque de él también vamos a hablar.
CLÁSICO: El novio sigue siendo fiel al chaqué
Sin lugar a dudas, es la manera en la que sabes que vas a acertar, pero hay que tener en cuenta una cosa: se han dejado de llevar los chaqués más clásicos, de pantalón de rayas gris y levita negra, para dejar paso a los monocolor, donde el azul es el verdadero rey. Dan un aspecto mucho más moderno e, incluso, juvenil, y si te lo haces a medida, además, siempre puedes encargar a tu sastre una americana para aprovechar los pantalones que te confeccione más allá de tu boda.
Aporta un toque rompedor (sin pasarte) con el estampado del chaleco y de la corbata que, si quieres nuestro consejo, nunca deberían compartir print. El toque final se lo darás con una joya que bien puede ser el reloj que te regalaron en la pedida de mano o bien un modelo como el que te presentamos, a juego con el chaqué: el F.P. Journe Quantième Perpétuel, con calendario perpetuo, como vuestro amor (sí, esta juego de palabras nos venía al pelo).
ACTUAL: Un traje nunca falla
El azul se impone también para los novios que quieren apostar por un traje el día de su boda. Aquí la cosa se complica cuando toca el turno de elegir el tipo de chaqueta. Si bien mucho se decantarán por la de dos botones, lo cierto es que cada vez vienen con más fuerza los modelos cruzados, que, para qué negarlo, le dan un aire más distinguido.
En este caso, nunca debes de olvidar el toque de estilo que le da un pañuelo en el bolsillo superior de tu chaqueta, así como el detalle de unos bonitos gemelos, que también han podido ser un regalo. En este caso, y por ser algo más originales, nos decantamos por un diseño de mariquitas, que la da un aire informal.
BODAS AL EXTERIOR: ¡Viva el amor libre!
Para aquellos que huyen de convencionalismos, se han inventado las bodas en le exterior. Sentirte en comunión con la naturaleza puede ser una muy buena opción para empezar una nueva etapa en tu vida. En este caso, las propuestas que encontramos se enfocan más en dejar la chaqueta apartada y presentarnos directamente en camisa. Eso sí, siempre apostando por el monocolor. Puede parecer arriesgado, pero te aseguramos que triunfarás.
En este caso, el detalle que va a llamar la atención va a ser tu opción por una pulsera que le dé un aire deluxe a tu look. Te casas en el campo, pero eso no quiere decir que ni tú ni tu pareja hayáis obviado el estilo. Boucheron presenta un diseño de esclava en oro blanco y diamantes que se va a convertir en tu joya más preciada.
NOVIOS DE NOCHE: Di “sí quiero” con la luna como testigo
La etiqueta manda que el esmoquin se luzca por la tarde, así que para aquellos que prefieran las bodas al atardecer o, incluso, de noche, lo mejor es que recurran a la pajarita. Como comentábamos antes, el esmoquin poco a poco va captando más adeptos que se dejan seducir por la elegancia de esta prenda. Nos vale tanto la chaqueta cruzada, como sencilla y con solapa de esmoquin, lo que no nos vale es una pajarita que no haya sido anudada por ti mismo. Ahí es donde marcarás la línea roja del estilo.
Para los que opten por un paso más allá, encontramos una versión mas desenfadada, donde la camiseta puede sustituir a la camisa. ¿Te arriesgas con ella?
Y, aunque la joya estrella del día sea la alianza, eso no quiere decir que no puedas lucir también un sello en tu dedo. Vistiendo de esmoquin, es el diseño que más le pega.
CAMBIO DE ESTADO: Llega la revolución
No solo cambias de soltero a casado, sino que ese día tú también puedes cambiar de traje. No es lo más habitual, pero si las novias lo hacen cada vez más, ¿por qué no plantearlo para hombre? En este caso, lo tenemos muy claro: si te animas, deja que vuele la fantasía. Opta por chaquetas con lentejuelas, camisas vaporosas… que se note que estás de celebración y, sobre todo, en uno de los días más felices de tu vida.
¿Cómo darle el toque definitivo? Una cadena de grandes eslabones de oro nos parece una de las mejores opciones que vas a encontrar. ¿No crees?
