Supongo que, de esos tantos hitos en la vida de los hijos/as, el día de la boda es uno de los más especiales y emotivos para las madres en todo el mundo. Yo aún no lo soy, de ahí mi suposición. Pero sí que tengo muy vívido el recuerdo de mi padre –quien, en mi caso, fue el padrino– al verme vestida de novia, su brazo firme acompañándome y su atención al darme su pañuelo para secar mis lágrimas. ¡Lloré durante toda la ceremonia! Recuerdo también lo guapísima que iba mi madre y la felicidad que irradiaba. De joyas llevó un conjunto de collar corto y pendientes de perlas y eslabones en oro amarillo que le regaló mi padre precisamente para que los luciera en la boda y que ahora atesora por su especial recuerdo.
Según marca la tradición, en las bodas españolas la figura de la ‘madrina’ está reservada para la madre del novio, mientras que el padre de la novia será el ‘padrino’. Obviamente, las distintas configuraciones y circunstancias familiares junto a la aprobación de los matrimonios igualitarios han flexibilizado el protocolo nupcial permitiendo a las parejas elegir quiénes ejercerán este destacado papel en sus enlaces. En otros países estos roles no están tan prestablecidos como aquí, por lo que los novios tienen albedrío para elegir entre sus amigos más íntimos y/o familiares especiales. Sea como sea, si eres la feliz madrina de boda o bien la orgullosa madre de la novia o del novio, esta selección de joyas RABAT te harán brillar, a la par de hacerte sentir única y elegante.
¿Cómo elegir las joyas perfectas para la boda?
Las joyas son mucho más que un complemento de lujo. Son el extra de confianza que necesitas para acompañar a los novios en el altar y hacerlo con amor, elegancia y clase. Acertar es mucho más fácil de lo que parece, tanto si te dejas guiar por la etiqueta como si lo haces por tu intuición. Eso sí, ya lo decía Iris Apfel: «Tener estilo y estar a la moda son dos cosas totalmente distintas»; por eso nuestro consejo es que apuestes siempre por el estilo (no por tendencias pasajeras) para vestir en un día tan especial.
Ante cualquier duda, opta por joyas clásicas e intemporales como las perlas o los diamantes, y en tamaños y formas discretas como los pendientes dormilonas o de largos estilizados. Te aportarán sofisticación haciéndote sentir cómoda y segura. Si el vestido es de una silueta, tejido o estampado elaborado, las joyas sencillas equilibrarán el estilismo sin recargarte. Por el contrario, si el minimalismo no va con tu personalidad y «más es más» es parte de tu identidad, no tengas miedo a atreverte con joyas llamativas, coloridas y con volúmenes XL. Las colecciones ‘RABAT Natural Stones’ y ‘Rabat 70’s’ son perfectas para esta misión de abrazar el exceso con la joyería. En looks de madrina más simples, serán el punto focal perfecto.
Joyas de diamantes para madrinas, tradición y elegancia.
Que sean polifacéticos es parte de la belleza de los diamantes. No sólo son eternos, también hay uno para cada tipo de mujer. Su luz se proyecta sobre quien los luce.
Si para la boda te decantas por un estilo clásico y conservador las joyas con diamantes y oro blanco te ayudarán a trasmitir esa sofisticación y lujo silencioso del que haces gala. Piezas a juego de collar, pulsera y pendientes son una buena elección. Diamantes en joyas tipo vintage, art decó y rivière son ideales para trasmitir atemporalidad; mientras que las piezas con diamantes multitallas hablan sobre una mujer de elegancia contemporánea a que gusta lucir joyas más especiales. En ‘RABAT Diamond Rainbow’ y ‘RABAT Red Carpet’ encontrarás estas opciones.
Joyas con piedras preciosas para madrinas, glamour con color.
Podríamos decir que hay dos formas de jugar con la joyería y el color. La primera, combina el allure de los diamantes con las piedras preciosas que aportan el toque de color justo y chic a cualquier estilismo. Es belleza clásica, glamour y equilibrio. Un sí al color, pero con mesura. Las colecciones ‘RABAT Precious Stones’ y ‘RABAT One of a Kind’ centran, precisamente, sus diseños en las piedras preciosas como la esmeralda, rubí, zafiro azul y zafiro rosa. Y la segunda opción invita abraza el colorido de las joyas con gemas naturales como absolutas protagonistas: amatista, topacio, jade verde, coral, etcétera. Piezas que hablan de buen gusto, vitalidad y alegría, sin perder por ello esa exclusividad que ofrece la joyería artesanal de lujo. ‘RABAT Natural Stones’ y ‘RABAT Rainbow’ son muy buen ejemplo de esta predilección.
Para elegir el color ideal siempre puedes partir de una narrativa poética; por ejemplo, haciendo un guiño a la estación del año en la que se celebre el enlace (imagina joyas en tonos tostados para el otoño o con la intensidad del zafiro para una boda de invierno). Más pragmático es trabajar con la armonía y el contraste para coordinar vestido y joyas. Es decir, explorando el monocolor, los distintos tonos de una gama o los análogos dentro del círculo cromático; o bien atreviéndote con los colores opuesto para así vibrar en matices o crear puntos de atención dentro del estilismo. Por ejemplo, en esa preciosa joya con la que brillarás como la madrina inolvidable que serás.
