Que las modas van y vuelven es algo que todos tenemos asumido con solo echar un vistazo a nuestro armario. La relojería no es ajena a estos cambios. Ya hemos hablado anteriormente de cómo los relojes pequeños han vuelto con fuerza después de años de dominio de los modelos de gran diámetro. O, por ejemplo, de la popularidad de los brazaletes integrados, cuando hace relativamente poco los materiales preferidos para las correas eran la piel y el caucho. Repasadas las modas, quién no se acuerda del oro amarillo.
A pesar de ser la variedad más popular del metal precioso, o quizás precisamente por eso, el oro amarillo perdió el favor del público relojero a comienzos de los años noventa en beneficio del oro rosa. La apuesta por este último ha sido tan intensa en las últimas décadas que el oro amarillo acabó arrinconado y tachado de antiguo y un poco hortera. Por suerte, las reticencias por el metal precioso parecen remitir y ya son muchos los aficionados, jóvenes principalmente, que encuentran en el oro amarillo un gran atractivo. Y nos parece fenomenal, porque solo hay que ver las piezas que ha lanzado Hublot dentro de su Yellow Gold Collection para disfrutar de la genuina belleza de este dorado metal.
Una tradición con más de cuarenta años de historia
Aunque Yellow Gold Collection es de reciente creación, el vínculo de Hublot con el oro amarillo hay que buscarlo en los propios inicios de la marca. Ocurrió en 1980, cuando su creador Carlo Crocco sorprendió a todo el mundo con un reloj con caja de oro amarillo y correa de caucho. Era la primera vez que dos materiales, en apariencia tan incompatibles, aparecían juntos en un reloj. El Classic Original, que como se conoce hoy en día a aquel primer reloj de Hublot, fue un éxito inmediato y estableció la identidad de Hublot como “artista de la fusión” que años más tarde alcanzaría su cénit en el Big Bang. Con tan marcadas raíces, ¿cómo no iba a ocupar el oro amarillo un papel relevante en la estrategia de Hublot?
Hublot Yellow Gold Collection, un clásico de vuelta
Muchas cosas han cambiado en estos cuarenta años. El amarillo era la tonalidad preferida del oro cuando salió el Classic Original, pero los gustos del mercado evolucionaron y el oro rosa se convirtió en el predilecto del público. Esta tendencia se mantiene hoy en día, con esta variedad como la aún preferida de la gran mayoría de clientes, algo que Hublot también refleja en su catálogo.
La vuelta del oro amarillo ha servido a Hublot para “reescribir” su reciente historia. La Yellow Gold Collection recrea los grandes hitos de la firma, adaptados al universo del oro amarillo. La colección comprende seis piezas, entre las cuales encontramos algunas de las referencias de mayor éxito de Hublot en los últimos tiempos. El oro amarillo también nos aporta un original cambio de perspectiva de estos iconos de la marca.
Classic Fusion Chronograph, la gran estrella
Entre todas las propuestas de la Yellow Gold Collection, brilla de manera especial el Classic Fusion Chronograph. Es el primer cronógrafo de esta colección que se fabrica con esta modalidad de oro. Las sobrias y elegantes líneas de la caja Classic Fusion cobran un nuevo protagonismo. El Classic Fusion tiene un diámetro de 42 milímetros con un grosor de 11,90. Además, es hermético hasta 50 metros. La función se nos presenta en una depurada disposición bicompax que ayuda a mantener la sobriedad de la esfera y que tanto nos recuerda al histórico Classic Original. Equipa un movimiento automático MHUB1153 de carga automática con reserva de marcha de 42 horas. Su decoración es visible a través del fondo transparente de la caja. Como manda la tradición, el reloj se completa con una correa de caucho negro con la superficie con un patrón lineal.
Big Bang Único, el poder de un icono
No podía faltar a la “llamada” del oro amarillo el Big Bang Unico, el reloj fetiche de Hublot. El Big Bang Unico siempre ha sido la plataforma preferida por Hublot para mostrar su pasión por los materiales más diversos. Oro rosa, cerámica, oro cerámico (Oro Magic), titanio, carbono y zafiro han sido algunos de los más utilizados a lo largo de los años. Curiosamente, no existía hasta la fecha un Big Bang Unico en oro amarillo. El resultado es tan espectacular como esperábamos.
La caja del Big Bang Unico aprovecha bien la luminosidad del oro amarillo, gracias también al acabado cepillado de su superficie y el poderoso contraste con los elementos en negro. La caja tiene un diámetro de 42 milímetros con un grosor de 14,50 milímetros. Es hermética hasta 100 metros. La esfera de zafiro transparente permite disfrutar de los elementos exclusivos del calibre Unico, como el disco de fecha o la rueda de pilares del cronógrafo junto al índice de las 6 horas. El movimiento, exclusivo de Hublot, ofrece una reserva de marcha de 72 horas. La correa de caucho negro cuenta con el sistema One Click que permite su cambio en apenas unos segundos y sin necesidad de herramientas.
Big Bang Unico Integral, tres mejor que uno
Dentro también de la línea Big Bang Unico nos vienen tres propuestas muy especiales con el oro amarillo como protagonista. O, mejor dicho, una propuesta por partida triple. Nos referimos a los Big Bang Integral, el revolucionario reloj que combinó por primera la caja del Big Bang con un brazalete metálico integrado. Como es lógico, el interés de esta pieza estriba en la genial apariencia de un Big Bang todo fabricado en oro amarillo, incluyendo los facetados eslabones de su brazalete.
Si esta imagen full gold no fuera suficiente, el Big Bang Integral de oro amarillo también se ha presentado en una doble versión engastada con diamantes tanto en la caja como en el brazalete. Se diferencian en la elección de unos diamantes en talla baguette para el engaste del bisel y los índices de la esfera. Las tres versiones comparten características técnicas, con una caja de 42 milímetros de diámetro, hermética hasta 100 metros, y movimiento automático manufactura Unico con función cronógrafo y reserva de marcha de 72 horas.
Spirit of Big Bang
Hublot no ha dejado pasar la oportunidad de presentar también una versión de uno de sus relojes de forma con caja de oro amarillo. El elegido ha sido el Spirit of Big Bang, un reloj cuya forma tonneau (tonel) se adapta de manera natural a la muñeca. El Spirit of Big Bang es un reloj sin duda diferente, ideal para aquellas personas a quienes no les gusta pasar desapercibidas. Tiene un diámetro de 42 milímetros con un grosor de 14,10 milímetros y una hermeticidad de 100 metros. Al igual que sus compañeros de colección, el Spirit of Big Bang tiene una esfera transparente que nos permite ver los detalles mecánicos de su movimiento automático. Cuenta con correa de caucho con estructura de líneas y sistema de cambio rápido One Click.
Classic Fusion Original, la vuelta a los orígenes
Aunque los modelos arriba indicados son los que componen la colección Yellow Gold, no son los únicos relojes realizados en oro amarillo por Hublot en la última temporada. Hablábamos antes del Classic Original y el impacto que supuso su salida al mercado en 1980. Hublot decidió rendirle un homenaje en 2020 con motivo de su cuadragésimo cumpleaños. El reloj, lanzado en edición limitada de 45 milímetros, recuperaba la minimalista esfera negra, sin índices horarios y con el logotipo de Hublot con única decoración. Aquel modelo conmemorativo ha inspirado la reciente serie Classic Fusion Original, lanzada en titanio, cerámica negra y ¡oro amarillo! Como el primer reloj de la firma, los nuevos Classic Fusion Original carecen de indicaciones horarias y ceden todo el protagonismo a la ya icónica combinación de oro y caucho. Este modelo está disponible en tres tamaños de caja: 33, 38 y 42 milímetros. La versión más pequeña equipa un movimiento de cuarzo, mientras en la de 38 y 42 milímetros se ha optado por un movimiento automático.